VOLVIENDO A MI INFANCIA
El otro día me dio por coger un viejo libro que tenía por casa y ponerme a recordar mi infancia leyendo. Se trataba, ni más ni menos, que de La historia interminable y la verdad, es una de esas cosas de la infancía que uno recuerda con cariño.Fundamentalmente, la gente de mi generación, los muchachos entre la veintena y la treintena, recordamos la película: esa en la que un niño guapete de cara y un poquillo mofletudo robaba un libro en una tienda, en la que un niño aún más guapete y desgarbado que respondía al nombre de Atreyu se iba con Artax a salvar a la emperatriz infantil, en la que el dragón de la suerte Fújur podía ayudarte a volar y en la que un gnomo te enseñaba cómo atravesar las protecciones en el Oráculo del Sur...en fin, una aventura en toda regla, de la que después se hicieron dos continuaciones sin venir a qué...pero vamos, la primera era entrañable.
La edición original del libro era estupenda, como algunos sabreis, estaba escrito a dos tintas: Roja y Verde, la roja para Bastian en el mundo real y la verde para el mundo de fantasía. Además, cada capítulo empezaba con una letra, iban de la A a la Z y estaban ilustradas con cosas relacionadas con el capítulo.En esta imagen de la izquierda podeis comprobar como, efectivamente, aparecen los mensajeros que avisan en Fantasí de que la Nada se está apoderando de todo el reino, están los personajes del principio, que nos hicieron mucha gracia y nos sorprendieron.
Entrañables personajes aparecen en sus páginas como son el Comerocas (o Comepiedras), el caracol de carreras, el murciélago aquel que tenía sueño,la Vieja Morla, los faunos, los fuegos fatuos y todos los seres de Fantasía, un reino que no tenía fronteras...Y como en toda historia, tiene que haber un malo: esta la Nada, que es lo que está destruyendo a Fantasía y su Emperatriz Infantil y a su ser de maldad Gmork, un enorme lobo negro como la noche que perseguía a Atreyu para darle caza.
Eso si, si leeis la novela mejor, cuenta muchos más detalles y muchas más cositas que la película aunque esta es una buena adaptación del libro. Sin duda, de las mejores de la época.
Vamos, que me puse a recordar lo bien que me lo pasaba yo y pensaba ¿las nuevas generaciones habrán podido soñar como nosotros? La respuesta es si, pero no como nosotros, que vivimos una Historia Interminable, un Willow y muchas otras historias de magia, espadas y maravilla...Ahora, gracias a los videoclubs, creo que todos podremos disfrutar de un cachito mágico de la infancia perdida.
Tirad de biblioteca casera y de videoclub de vez en cuando...es bonito recordar estas cosas.
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Azrrael -